Como entidades separadas nunca conseguimos mover nada en este mundo. Pero al reconocer la Presencia de la vida en cada uno, las cosas suceden sin esfuerzo.
Es que en la vida Todos es Uno. Nada está separado de nada. El mundo que te rodea es uno contigo. Vivimos desde una percepción limitada de los acontecimientos. Vemos muy poco, de lo que hay que ver porque siempre procuramos dar poder al mundo antes de lo que está en el interior.
Solemos molestarnos cuando alguien cuestiona tus creencias acerca de algo. No se trata de la molestia en sí, sino de lo que dicha creencia trae consigo. Protegemos con capa y espada nuestras preciadas creencias, pero no son más que conceptos inútiles cuando ya no se les da el mismo aprecio que antes. Es verdad que toda creencias te permite llegar hasta las puertas del Conocimiento, pero no te puede llevar más, porque el último paso lo da Dios.
En la vida sucede exactamente igual, no permitimos ser un canal de la Presencia, es más queremos controlar todo lo que sucede en la vida. Cuando controlamos estamos luchando con la vida, y así nunca se llega a nada.
Si te crees separado de los demás, no llegarás a buen puerto, la vida funciona por colaboración, con cooperar con tus semejantes para lo que tu quieres se de. ¿No, es así como funcionan las cosas?. Si quieres hacer algo necesitas la colaboración de todos para lograrlo.
Con cada persona que te encuentres, yace en ella la semilla de la Divinidad esperando que tú la reconozcas. Todo es parte de ti, Pues, compartes el mismo Ser con todos.
Reconócelo así, porque te quitas el peso de encima de ti, ya no buscas agradar a los demás ni de buscar su aprobación porque reconoces la grandeza que hay en ellos, y es por supuesto tu propia grandeza. Nada te falta, tal vez solo hace falta que lo pidas y lo tendrás. Qué más da, si puedes y no te lo dan, sigues pidiendo de todas formas hasta que alguien coincida contigo y te de lo que tu deseas. Pide y se te dará. El mundo es un lugar de oportunidades que cada día, se cuecen para que tu salgas en busca de alguno.
La vida te ha dado el regalo más grande, tú, ahora agradece con vehemencia ese regalo, siendo proactivo a lograr tus metas y objetivos, en esta experiencia. El tiempo es corto para tu ego, pero eterno para tu Ser, quien elijas te dará un problema o una solución.
Lo tengo claro desde un principio, el pequeño yo, es temporal a medida que sigas identificándote con él. Pero el Ser es intemporal y mora en el ahora, donde todo tiempo no existe, fuera del espacio, solo intemporal, más allá de todas las cosas.
Reconoce al Ser en ti, y recobrarás tu eternidad con la vida. Entonces el mundo será reconocido por la belleza de Amor por la vida. Sé excelente y mejor en lo que hagas, esfuérzate, sé disciplinado y la vida sonríe a todos lo que están sirviendo a los demás, y dejan de lado todo egoísmo por ser popular.
Nunca y jamás conseguimos nada por tu propio lado, siempre hay algo más que nos inspira para progresar, tu vida habla de ti, de quien sino. Lo sutil, lo que no se ve, es mucho más poderoso que el personaje que te acompaña que de momento es tu personalidad.
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